Eso es lo que afirma un estudio (1) realizado recientemente por investigadores de East Anglia en el Reino Unido y de Harvard. En efecto, consumir 150 gramos de arándanos al día según este estudio tiene efectos protectores en el sistema cardiometabólico, gracias a los flavonoides presentes naturalmente en esta pequeña baya.
Los investigadores del estudio se han interesado en el síndrome metabólico, que afecta hoy a una tercera parte de los adultos en los países occidentales. Se habla de síndrome metabólico cuando un individuo concentra como mínimo tres de los cinco factores de riesgo cardiovascular siguientes: hipertensión arterial, nivel demasiado bajo de colesterol « bueno », nivel demasiado alto de triglicéridos, hiperglucemia (nivel de azúcar en sangre demasiado elevado) y exceso de grasa abdominal (contorno de cintura considerable).
El síndrome metabólico aumenta de manera muy importante el riesgo de enfermedad cardiaca, de accidente vascular cerebral y de diabetes tipo 2, además de ocasionar muy a menudo la prescripción de medicamentos para tratar los síntomas que lo acompañan. Ahora bien, según los resultados del estudio, el consumo de 150 gramos de arándanos al día, es decir el equivalente a un pequeño cuenco, tiene un efecto protector innegable : ¡Disminuye la rigidez arterial y la función vascular en general, reduciendo con ello de un 12 a un 15 % el riesgo cardiovascular en las personas que padecen un síndrome metabólico!
La fuente de este beneficio reside en los antocianos , que se encuentran en gran cantidad en esta pequeña fruta. Los antocianos son pigmentos naturales que dan a los arándanos su color azul tan característico. También son responsables de las pigmentaciones que van del rojo al azul pasando por el violeta de muchas plantas, de las flores, las frutas y las hojas. ¡Respecto al rojo de la uva (y por tanto del vino), los culpables son los antocianos! Éstos forman parte de la gran familia de los flavonoides: éstos son polifenoles que se encuentran en numerosos vegetales y que son reconocidos por sus efectos globalmente beneficiosos para el organismo.
Los antocianos y los otros flavonoides de los arándanos, como la quercetina, las catequinas o el resveratrol , les confieren beneficios excepcionales y variados, haciéndolos merecedores del sobrenombre de “superfruta”:
Los investigadores del estudio aconsejan por tanto, además de adoptar una alimentación equilibrada, consumir muy regularmente arándanos para beneficiarse de sus excepcionales propiedades… ¡Que comience la recogida!
Referencia científica
(1) P. J. Curtis,V. van der Velpen, L. Berends, A. Jennings, M. Feelisch, M. Umpleby, M. Evans, B. O. Fernandez, M. S. Meiss, M. Minnion, J. Potter, A. Minihane, C. D. Kay, E. B. Rimm, A. Cassidy. Blueberries improve biomarkers of cardiometabolic function in participants with metabolic syndrome—results from a 6-month, double-blind, randomized controlled trial. American Journal of Clinical Nutrition. Vol 109, pp 1535–1545, 2019.
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